Guía cuidado de la piel: tips básicos para una piel sana

Buenos días aquí les dejo una nota súper interesante y FLORETTI te desea un feliz comienzo de semana.

Pon en práctica nuestros consejos «Guía cuidado de la piel: tips básicos para una piel sana»

El post de hoy pretende ser una guía rápida sobre cuidados básicos de la piel. Con la gran variedad de productos cosméticos que existen hoy día a veces podemos sentirnos indecisas (sobre todo las chicas más jóvenes que se están iniciando en el mundo de la belleza) a la hora de elegir que es mejor para cada momento y para cada tipo de cutis.

Yo no soy una especialista y a muchas no les desvelaré nada nuevo con esta entrada, pero visto el éxito que está teniendo el post que hice sobre el cuidado del contorno de los ojos (ya lleva más de 1300 visitas!!!) me apetecía hablaros un poco del tema desde mi experiencia personal.

Llevo usando cosméticos de cuidado facial desde que era niña, vendí cosméticos durante más de 10 años, redacté un curso básico sobre este tema para una web y llevo años escogiendo los cuidados faciales de mi madre…y durante todos estos años he aprendido que por muchos productos novedosos que salgan al mercado hay 4 reglas básicas para tener una piel sana:

– Limpiar.
– Hidratar.
– Exfoliar.
– Proteger.

Siguiendo estos pasos y con unos cuantos productos básicos lograrás tener una piel bonita.

TIPOS DE PIEL

tipos-de-piel

Algo básico antes de comprar ningún producto es determinar que tipo de piel tienes. Normalmente se distinguen tres tipos básicos de piel: normal, seca y grasa. A la piel mixta se considera un subtipo, pero yo lo incluyo en el apartado de “piel loca tutti frutti” ya que tiene rasgos de todas las demás: al menos la mía, no solo tiene zonas secas y zonas grasas si no que las zonas secas se vuelven más secas o las grasas más grasas según la estación del año…aparte de las rojeces de las zonas más sensibles, las imperfecciones…vamos una fiesta…jejeje.

Para saber que tipo de piel tienes debes fijarte es su fisonomía:

– Si tras lavarte la cara sientes la piel cómoda, si tu cutis es terso y de textura regular y con poros pequeños tienes una piel normal.

– Si sientes la piel tirante e incómoda, con descamaciones, con poros apenas apreciables y con falta de brillo tu piel es seca.

– Si tienes poros muy abiertos, imperfecciones, puntos negros y sientes que está demasiado oleosa hasta después de lavarte la cara tienes la piel grasa.

– Si te pasa un poco de todo lo anterior mezclado según le dé la gana a tu caprichosa piel… ¡enhorabuena!, formas parte del club de las pieles mixtas XD

– Por supuesto también están las pieles sensibles que presentan rojeces, capilares rotos e irritaciones varias pero éstas se merecen un post aparte.

PASO 1. LIMPIEZA

limpieza

El primer paso básico de cualquier rutina facial es la limpieza. De poco sirve comprar las mejores cremas del mundo mundial si las aplicas sobre una piel con toxinas incapaz de aprovecharlas.

– Si tienes la piel normal….tienes mucha suerte y puedes utilizar casi cualquier producto que te apetezca para limpiar tu piel: jabones sólidos, leches, cremas limpiadoras, mousses, aguas desmaquillantes, aceites…prueba, reprueba y elige lo que más te guste. Luego aplica un tónico o unas pulverizaciones de agua termal para cerrar poros y tonificar la piel.

– Si tienes la piel seca… debes tener más cuidado a la hora de elegir los productos que vas a utilizar en tu rutina diaria. Lo más adecuado es utilizar cosméticos que no agredan el manto lípido de la piel al realizar la limpieza cutánea. Leches limpiadoras, desmaquillantes en aceite y cremas limpiadoras serán tus mejores aliadas.

– Si tienes la piel grasa… mucho cuidado con los limpiadores que utilizas. Si usas un producto demasiado astringente te hará un efecto rebote y tu piel en vez de tener menos grasa producirá más (lo que hacía falta…). Usa cosméticos que equilibren la piel sin agredirla: limpiadores con té verde, mascarillas de arcilla… hay muchas opciones para ayudar a tu piel.
Tras la limpieza usa siempre un buen tónico para cerrar los poros.

– Si tienes la piel mixta… escucha a tu piel y hazle caso. En mi caso siempre tengo diferentes tipos de limpiadores para adaptarme al estado de mi piel. En verano suelo usar la limpiadora de té verde de The Body Shop o el gel limpiador Papulex. Como en este momento mi piel no está tan grasa estoy usando la limpiadora en mousse de Aloe Vera de Bottega Verde y también tengo en “reserva” una leche limpiadora de camomila de Yves Rocher. Por norma general siempre uso limpiadores para usar con agua y luego en vez de tónico uso agua termal.

Y por favor… JAMÁS OS VAYÁIS A DORMIR SIN DESMAQUILLAROS!. NUNCA, NUNCA, NUNCA!!.

PASO 2. HIDRATACIÓN

hidratación

Fácil. Tras la limpieza diaria aplica una buena hidratante adaptada a tu tipo de piel: más rica para las pieles más secas, en textura gel para las más grasas.

A partir de los 25 elige una hidratante antiedad para prevenir las arrugas.

Por la noche lo mismo: una nutritiva hasta los 25 y una antiarrugas a partir de esa edad.

Este punto es muy importante.

Muchas veces veo a chicas que son youtubers y bloggers que se quejan cuando alguién les recomienda una crema antiarrugas o cuando le mandan un producto de este tipo en alguna “beautybox”… ”si solo tengo 28 años”. Ahí es cuando yo digo: “pues ya llevas 3 años de retraso”.

Es un hecho científico que la piel comienza a envejecer a partir de los 30 años: se oxigena menos, sus células se regeneran más lentamente, se va perdiendo colágeno… Todo lo que hagamos de los 20 a los 30 años determinará mucho como envejecerá la piel. Usar productos antiarrugas a partir de los 25 años no es para quitar las arrugas, porque a esa edad lo normal es no tenerlas, el objetivo es prevenir su aparición temprana y conseguir que hagan su entrada triunfal en nuestra piel lo más tarde posible.

PASO 3. EXFOLIAR

Gesto imprescindible para ayudar a la piel a autoregenerarse. Es uno de mis secretos de belleza favoritos!.

Lo único a tener en cuenta:

– Si tienes la piel seca o sensible úsalo solo una vez a la semana y escoge un exfoliante con un grano no muy agresivo.
– Pieles mixtas y grasas pueden hacerlo dos veces a la semana o incluso a diario si el exfoliante es muy, muy, muy suave.
– Si tienes la piel tirando a seca… no te pongas en la cara un exfoliante corporal. Yo lo hice hace poco con un exfoliante corporal de Lush y me hice un estropicio… entre que tenía la piel algo seca y que aquello rascaba demasiado acabé con el careto como un tomate y hasta con arañazos… mucho cuidado!.

PASO 4. PROTEGER

solar

Algo imprescindible para tener una piel sana y protegida: usa protección solar todo el año. Y cuando digo todo el año incluyo a esos días grises y lluviosos de invierno en los que vas embutida en mil capas de ropa. Esté como esté el día (soleado o nuboso) las radiaciones nocivas del sol siguen llegando hasta nuestra piel por lo que es imprescindible usar protector solar a diario.

Puedes usar un protector específico o para abreviar el número de productos que utilizas (algo bastante beneficioso para las pieles más grasas) una hidratante de día o base de maquillaje con SPF.
A ser posible, escoge productos con un factor mínimo de 20 para lugares de radiación normal y superior (30/50) si vas a la playa o a la nieve.

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